Hacer pilates: Los beneficios que ofrecen estos ejercicios

Una gran variedad de disciplinas se caracterizan por enseñar sus principios orientados al trabajo de cuerpo y mente, los pilates son uno de ellos. Su enfoque precisa en alcanzar y mantener un equilibrio entre mente y cuerpo a medida que se ejecutan determinados movimientos.

Con el pasar de los años, su reconocimiento se ha expandido a nivel mundial, por lo que hoy en día, muchas personas hacen prácticas de esta disciplina para la mejora del bienestar. Además de que también es una herramienta recurrida para aquellos individuos que tienen lesiones en su cuerpo y necesitan una respectiva rehabilitación.

No hace falta tener algún percance físico para motivarse a la práctica de pilates, pues sus beneficios pueden brindarse a cualquiera que esté buscando una mejora de su estado mental y físico. Incluso pueden hacerlo aquellos que deban complementar la práctica de un deporte más intenso.

¿Qué es pilates?

Recién mencionamos que es una disciplina cuyos enfoques se establecen en el equilibrio entre cuerpo y mente. El nombre proviene de su creador, Joseph Pilates, el alemán que en 1920 dio a conocer esta disciplina y, desde entonces, no dejó de crecer su popularidad.

Cuenta con alrededor de 500 ejercicios anaeróbicos integrados a los tres objetivos principales pertenecientes a los pilates: la mejora en la postura del cuerpo, incremento de fuerza corporal y aumento de la flexibilidad.

Este método deportivo, además de tener todos estos enfoques, cuenta con otros seis principios que lo distinguen de cualquier otra actividad deportiva.

Concentración

Los mejores beneficios obtenidos de los pilates se consiguen por medio de la conciencia puesta en cada movimiento del cuerpo y la respiración. De la concentración y atención a los ejercicios, se obtiene el balance entre el cuerpo y la mente.

Control

Su creador definió como “contrología” a los pilates, pues integra el arte de poder controlar al cuerpo. En otras palabras, Pilates, con su definición, se refiere a que cualquier movimiento ejecutado está bajo control.

Este principio parte como la importancia de evitar movimientos bruscos y rápidos que hagan verse descontrolados, ya que en su mayoría, ese tipo de movimiento termina como consecuencia a lesiones físicas en quien lo ejecute.

Centralización

Según Pilates, hay dos zonas o fuentes donde se concentra toda la energía requerida para ejecutar cada movimiento, estas las denominó como “mansión del poder” o “centro de energía”.

Dicho punto se ubica en la zona baja del tronco, dando la razón del porqué en los movimientos o ejercicios inician en el área abdominal, lumbar, caderas, glúteos y posteriormente, extremidades.

Precisión

La precisión del pilates nada más puede conseguirse a partir del control puesto a cada movimiento. Un movimiento tiene un propósito único, por ello es indispensable la precisión de su ejecución, de lo contrario no alcanzaría dicho objetivo.

Fluidez

Fluidez en pilates quiere referirse a los constantes movimientos de los ejercicios, sin pausas entre ellos. Los breves descansos sí se permiten, pero ellos tienen un tiempo y duración a respetar.

Dentro de este principio, resulta indispensable la flexibilidad del cuerpo para poder llevar a cabo movimientos seguros que no supongan una lesión o que puedan percibirse como violentos.

Respiración

La respiración es un acto voluntario que, en la mayoría del tiempo, se hace inconscientemente. Esta disciplina señala que, con el empleo de la concentración, es posible controlarla en su volumen y ritmos dependiendo de las situaciones.

Una respiración controlada en pilates permite la estabilización cuerpo y mente, pues la persona va a mejorar su capacidad respiratoria.

Beneficios de la disciplina

El pilates, al buscar equilibrio entre mente y cuerpo, supone para quien lo ponga en práctica, un método que puede brindar una buena cantidad de beneficios para ambas partes.

La influencia del pilates para la salud mental

Para la salud mental, los pilates son bastante tomados en cuenta, ya que a pesar de ser una disciplina buscada principalmente para la rehabilitación física, sus beneficios para la parte mental resultan destacables.

  • Liberación emocional: con cada músculo puesto en relajación, de inmediato estamos liberando emociones que puedan causarnos tensión. Muchas emociones las refleja nuestro cuerpo, independientemente que sean negativas o positivas, aunque en lo respectivo a las emociones de influencias negativas, es que los pilates ayudarán a drenarlas con cada ejercicio puesto en práctica. Sobre todo por la aplicación y enfoque de los principios ante cada movimiento.
  • Disminuye el nivel de estrés: con la liberación de emociones podemos esperar una disminución del estrés que carguemos. La práctica consecuente de pilates sirve como un método acertado para la relajación del cuerpo, todo a través del estiramiento y entrenamiento que metabolicen las hormonas responsables de las emociones y quiten la tensión de los músculos.
  • Conexión y equilibrio de mente y cuerpo: el ejercicio y fuerza mental está tan presente en la práctica de pilates como lo está la fuerza física, pues con cada movimiento a ejecutar, la mente debe tener completo enfoque en ello.
  • Control emocional: este tiene directa relación al control de la respiración. Los pilates se caracterizan por su principio de “contrología”, lo que quiere decir que, una vez aprendas a controlar la respiración de tu cuerpo, entonces podrás afrontar el control de las emociones y calma de la mente. Este aprendizaje puede acompañarnos por el resto de nuestras vidas, pues sabremos a qué recurrir cuando nos encontremos en momentos personales muy fuertes.
  • Incrementa la creatividad: con una mente libre de tensión y estrés es posible que eleve la creatividad en cualquier aspecto de la vida, bien sea que ayude en la vida personal, laboral o ambas.

Aportes positivos del pilates para el cuerpo

Ahora, centrándonos en los beneficios que pueden obtenerse del pilates para la mejora de nuestro cuerpo, podemos resaltar las más evidentes como la pérdida de peso, moldeo y tonificación muscular. Además, los pilates aportan:

  • Desarrollo e incremento de la flexibilidad: el aumento de la flexibilidad en el cuerpo es un aspecto importante a destacar sobre los beneficios que nos deja la práctica de pilates. Muchas personas pueden sentirse limitadas de ciertas acciones por la falta de elasticidad de su cuerpo, pero esta disciplina ayuda a desarrollarla hasta que ya no resulta ningún impedimento. Todo esto como resultado de ejercicios que se enfocan en el alargamiento de los músculos.
  • Corrección de la postura: los ejercicios consecuentes puestos en prácticas en el pilates, dan como resultado progresivo una destacable corrección en la postura del cuerpo. Con esta mejora, también es probable el alivio o desaparición de ciertos dolores. Cada sesión de pilates debe integrar actividades que ayudan con la mejora de posición del pecho, abdomen y los hombros.
  • Favorece en la rehabilitación: es cierto que para lesiones, los pilates resultan uno de los principales métodos a recurrir, pues muchos profesionales recomiendan la disciplina por el tipo de ejercicio a practicar. En su mayoría, contribuye con la mejora en los movimientos de articulaciones.
  • Desarrolla la capacidad de respiración: cada ejercicio puesto en práctica en una sesión de pilates, va estrechamente acompañado de ejercicios de respiración. Recordemos que esta disciplina tiene como principio el dominio de esta, así que será fundamental su práctica.

Con todo lo expuesto anteriormente podemos tener una idea a la razón del por qué los pilates resultan tan populares hoy en día, pues es una disciplina que puede ayudar a la fortaleza mental y física, como lo establecen sus objetivos. ¿Te animarás a iniciar las prácticas del pilates?

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