Síndrome del bebé azul: causas y tratamientos

El nombre del síndrome del bebé azul se le da a la manifestación clínica que se manifiesta a través de la piel y mucosas, tornándose en tonos azules por la posible falta de oxígeno en el organismo.

Cuando recién se da luz a un bebé, esas primeras horas de vida reciben un seguimiento crucial para determinar que las condiciones saludables del pequeño estén en perfecto estado.

Los médicos suelen indicar una posible presencia del tono azul en las extremidades del niño a consecuencia de que está recién saliendo del útero, un área donde ellos se mantienen bastante calientes y una vez que lo dejan, experimentan el cambio de temperatura.

Es cierto que esa experiencia en el intercambio de temperatura corporal que siente el recién nacido es efímera, se trata nada más de un momento, pero cuando permanece por más tiempo (días) el tono azul en el bebé, quiere decir que está bajo problemas de oxigenación y necesita un tratamiento inmediato a la complicación. Dependiendo de dónde proviene la causa del problema de oxigenación se podrá determinar la gravedad del problema.

Por tal motivo, queremos explicar qué es este síndrome del bebé azul, así como lo que se debe hacer para tratarlo y de qué puede originarse dicha patología.

¿Qué es?

Científicamente, el síndrome del bebé azul se conoce como la metahemoglobinemia infantil. Este nombre se da a partir de la acumulación de la metahemoglobina (es el término para referirse a un tipo de hemoglobina en particular) que no cuenta con la capacidad de mandar el oxígeno proveniente de los pulmones para cualquier parte del organismo.

La importancia de la presencia necesaria del oxígeno en los glóbulos rojos radica en que la sangre conserva su tonalidad intensa, a lo que la piel también se mantiene con coloraciones rosadas que indican una estabilidad saludable del organismo por un transporte exitoso del oxígeno a todo el cuerpo.

Por consiguiente, cuando los glóbulos rojos no corresponden a la oxigenación requerida, la sangre cambia la tonalidad a colores morados e incluso, la piel, puede tomar tonos azules o morados. Algunas veces la razón por la que los glóbulos rojos no tienen esa presencia de oxígeno suficiente, tiene que ver con problemas circulatorios, de los pulmones, hematológicos y, sin pasar por alto, el hecho de que quizá hay complicaciones en el bombeo del corazón.

¿Qué produce el síndrome del bebé azul?

Existen más de un par de factores que tienen relación a la causa del síndrome del bebé azul, este puede tratarse de los cuidados que se le dan al pequeño, y como puede que se trate de algo transitorio. De cualquier manera, señalaremos las causas más comunes.

La metahemoglobinemia

Así como la mencionamos un poco más arriba, destacamos que esta es quizá la causa principal del síndrome del bebé azul. Su razón se debe a la presencia de cantidades fuera de lo normal en este tipo de hemoglobina, la cual no permite el correcto transporte del oxígeno para todo el cuerpo.

Alteraciones relacionadas al corazón

En este punto mencionamos las posibles cardiopatías congénitas, la hipertensión arterial, así como la hipertensión pulmonar primaria. La primera de estas consecuencias tiene que ver con las malformaciones de las estructuras del corazón cuando nace el bebé. De manera general, al identificarse este problema, el médico puede advertir una posible manifestación del síndrome del bebé azul.

La razón que origina una alteración relacionada al corazón se debe a que el intercambio de información entre cada cámara de dicho órgano, establece un intercambio de sangre sin oxígeno y sangre oxigenada como respuesta a otra posible alteración del sistema circulatorio propio del corazón.

Eso conlleva a una sangre que no está lo suficientemente oxigenada por los bombeos del órgano, así que tampoco podrá cumplir con las exigencias y necesidades del resto del organismo. Una de estas complicaciones congénitas que más destaca es la tetralogía de Fallot, la cual produce la tonalidad azul en la piel del bebé.

Regulación de la temperatura corporal

Esta es una causa que suele ser de duración temporal en los bebés recién nacidos, y sobre todo los prematuros, puesto que no desarrollan por completo la regulación de la temperatura corporal.

Lo que quiere decir que, uno de estos pequeños que sienta frío, puede volver su piel azul como respuesta a la contracción de los vasos sanguíneos. Dicha alteración no permite que se genere un paso rápido de la sangre al resto del cuerpo, por lo que dicho retraso en la fluidez de la sangre manifiesta el color azulado de la piel.

Motivos pulmonares

Otra de las causas más comunes vinculadas al síndrome del bebé azul tiene que ver con motivos pulmonares, es decir, con el ingreso del oxígeno al organismo. Normalmente, es por el déficit de intercambio en los glóbulos rojos que no transportan la oxigenación necesaria para todo el organismo. Cuando este tipo de situaciones se presentan, es posible que den lugar a otras enfermedades o patologías como:

  • Asfixia
  • Malformación congénita de la estructura pulmonar
  • Bronquiolitis
  • Síndrome del distrés respiratorio
  • Neumonía

Causas menos comunes del síndrome del bebé azul

Aunque todas las causas que recién mencionamos resultan las más comunes en producir la tonalidad azul en el bebé, es cierto que también existen otros factores menos conocidos que pueden tener el mismo efecto:

  • Convulsiones consecuentes del bebé
  • Que la madre haya estado en contacto con elementos tóxicos, tal como medicamentos, drogas, químicos y otros.
  • Cianosis central transitoria

¿Cómo tratar a un bebé con el síndrome?

Indiscutiblemente, el médico de confianza será el encargado de orientar en el tratamiento correspondiente según el caso del bebé y la madre, recordemos que dependiendo de la causa que origine el síndrome es que puede determinarse un tratamiento.

  • En caso del ambiente frío que produzca el color azul en la piel del bebé, el pequeño deberá ser abrigado y acercado al calor de la madre hasta que su tono vuelva a regularse.
  • Si se trata de los problemas pulmonares, debe comunicarse de inmediato con el pediatra del recién nacido para que este indique cual ayuda darle al pequeño, es posible que sea hospitalizado mientras se alcanza la estabilidad de su salud.
  • En cuanto a las enfermedades relacionadas al corazón, deberá mantenerse bajo un tratamiento médico otorgado por un especialista en el área de cardiología infantil. Algunos casos requieren de cirugía cardiovascular una vez que el bebé pasa los seis (6) meses de vida.

¿Qué síntomas manifiesta el síndrome del bebé azul?

Tal y como lo comentamos desde un inicio de la entrada, la manifestación y tratamiento del síndrome dependerá de qué lo cause. Algunas pueden resultar transitorias y otras pueden permanecer por un largo tiempo si se trata de la presencia de alguna enfermedad severa. A continuación, comentaremos algunos síntomas que puede presentar el bebé

  • Debilidad en los músculos
  • Tonalidades azules tanto en la piel como en las mucosas, las zonas que se destacan en visibilidad azul son la nariz, pies, manos y en el área de la boca. Incluso el color es más notorio cuando el bebé rompe en llanto.
  • Complicaciones para respirar, se puede observar que toma respiraciones rápidas y poco profundas
  • Somnolencia

Con estos síntomas identificados es necesario acudir a emergencia lo más pronto posible para que el pequeño pueda someterse a las evaluaciones requeridas y tratamiento inmediato para que su estado saludable pueda volver a la normalidad y sobre todo, para que pueda respirar adecuadamente si antes tenía complicaciones para hacerlo. Ahora que conoces el síndrome del bebé azul, ¿Has estado con un pequeño que lo haya presentado?

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