La tetralogía de Fallot es el nombre otorgado a la anomalía cardíaca que se presenta en conjunto a otros cuatro defectos directamente relacionados entre sí, modificando la circulación de la sangre en el corazón y la que viaja hasta los pulmones. Esta patología comúnmente se conoce por tratarse de una enfermedad congénita.
La tetralogía de Fallot, quizá se trata de una condición sobre la que poco se escucha, pero de igual manera, es importante conocerla para saber cómo puede afectar y qué hacer para tratarla. Es por ello que, en esta entrada, conocerás sus signos y posibles causas.
¿Cuáles son los cuatro defectos que se dan en la tetralogía de Fallot?
Al indicarlo su nombre, tetralogía es la referencia a los defectos que aparecen en conjunto en esta patología, los cuales se identifican como:
- Estenosis pulmonar: se trata de la reducción de la válvula pulmonar con el tracto de salida, lo que conlleva a una obstrucción en el paso o flujo de la sangre que parte desde el ventrículo derecho y se dirige a la arteria pulmonar. La presencia de este defecto causa un trabajo más forzado del corazón, el flujo bajo de la sangre, que tampoco es rica en oxígeno (como debería serlo en casos normales). En algunos bebés que nacen con la tetralogía de Fallot, pueden tener atresia pulmonar, que básicamente se trata de una válvula pulmonar sellada por completo.
- Aorta desplazada o dextraposición de la aorta: la presencia de esta condición significa que la arteria encargada del transporte de la sangre, se encuentra fuera de su lugar (en un corazón sano se ubica por encima del ventrículo izquierdo). En esta tetralogía, se posiciona por encima de ambos ventrículos lo que no permite a la sangre carente de oxígeno entrar a la arteria pulmonar (como debería ser) sino que pasa al resto del cuerpo.
- Comunicación interventricular: este defecto produce la combinación de la sangre procedente del ventrículo izquierdo, que está enriquecida en oxígeno, con la proveniente del lado derecho, carente del oxígeno. El asunto manifiesta un suministro muy bajo o alto de la sangre en los pulmones.
- Hipertrofia ventricular derecha: como puede indicarlo el nombre, se trata del hinchamiento del ventrículo derecho ante el trabajo por la fuerte presión. Lo que complica el trabajo del flujo sanguíneo por la válvula pulmonar.
¿Qué causa la anomalía cardíaca?
Se sabe que las anomalías que se producen en el corazón del feto, se desarrollan pasadas las primeras semanas del embarazo. Al igual que se tiene conocimiento de que no hay causa en concreto que conlleve a la tetralogía de Fallot, en realidad existen varios factores o condiciones que llevan a padecerla, como lo es el factor hereditario.
Hay varios casos de la tetralogía de Fallot que están relacionados con causas genéticas en lo que se refiere a las anomalías o alteraciones cromosómicas. Por ejemplo, los niños con el síndrome de Down, pueden estar en una situación más propensa a padecer dicho defecto cardíaco.
También cabe destacar que aquellas madres en pleno estado gestante que contraen alguna enfermedad viral, como la rubeola, pueden aumentar los riesgos en tener un bebé con esta afección.
Sumamos el hecho de que, durante el embarazo, también hay otros factores que pueden perjudicar el desarrollo cardíaco normal del feto, como lo es el abuso de sustancias alcohólicas, una diabetes que no está correctamente controlada, mala alimentación y que la edad de la mamá esté por encima de los 40.
Una persona que tiene esta patología es propensa a tener un hijo que nazca con la misma condición. En los Estados Unidos se registra una cifra de un caso por tetralogía de Fallot en 2,500 niños recién nacidos.
Señales y signos de la tetralogía de Fallot
El signo o señal más frecuente que caracteriza esta afección es la cianosis. En ella distinguimos un recién nacido con coloraciones azules.
Al nacer un niño, se sabe que está en una buena condición de salud cuando su lengua y labios mantienen un color rosado. En cambio, en la tetralogía, la señal de que la cianosis se manifiesta es que presenta una piel, labios y lengua azul.
Estos episodios de cianosis pueden ser intensos y conocidos por varios nombres: episodios cianóticos, episodios Tet o episodios hipercianóticos. El color azul se intensifica repentinamente a causa de algunas actividades del pequeño, como llorar o comer. Algunos de los otros síntomas a tener en cuenta, son:
- Cansancio rápido y frecuente
- Soplos del corazón o cardíacos
- Desmayos
- Complicaciones para respirar
- Estado de inquietud
¿Cuál es el tratamiento para la tetralogía de Fallot?
La manera de tratar y corregir esta patología es por medio de intervención quirúrgica del corazón pasado poco tiempo de que el bebé haya nacido o en su etapa de lactancia. Esto será evaluado para la aprobación quirúrgica según la relación del peso, salud y gravedad de la afección o sus síntomas.
- Cirugía temporal: también suele indicarse como la cirugía paliativa, que consiste en lograr reparaciones pequeñas a fin de mejorar el flujo de la sangre. Este es el tipo de cirugía a recurrir cuando el caso de la tetralogía de Fallot es severo en el bebé, cuyos índices de salud son débiles y quizá no soporte una completa intervención.
- Reparación completa: en los casos de los pequeños que no se encuentran tan graves, el médico cirujano recomendará realizar la intervención para realizar un reparo completo. La finalidad del médico será ensanchar el conducto ubicado en medio del ventricular derecho con la arteria pulmonar para que el paso de la sangre incremente. Además de colocar un parche en la comunicación interventricular para impedir que la sangre carente de oxígeno se mezcle con la procedente del ventrículo izquierdo.
En el primer caso de la cirugía paliativa, el bebé si puede someterse a la cirugía completa, pero esto será una decisión sugerida por el médico una vez que determine que se encuentra más fuerte para la operación.
Otro factor a tener en cuenta es que, aunque los pequeños sean corregidos de la tetralogía de Fallot a través de la intervención quirúrgica, deberán ser constantes en visitas y chequeos médicos, ya que el seguimiento del estado del corazón es indispensable para descartar complicaciones. En algunos casos, hay bebés que requieren más de una cirugía para poder corregir por completo la tetralogía de Fallot.
¿Cómo se puede diagnosticar?
Existen varios métodos para el diagnóstico respectivo a la tetralogía de Fallot:
- Ecocardiograma: es básicamente una imagen obtenida por un eco al corazón. Este método permite ver el registro del movimiento o circulación sanguínea por el corazón, cuestión que mide la velocidad y dirección de la misma.
- Oxímetro de pulso: normalmente es el primer método a realizar, pues en las salas de los recién nacidos, a todos los bebés se les realiza la prueba. A modo de verificar una correcta concentración de oxígeno en la sangre.
- Electrocardiograma: el médico podrá sugerir este método para observar la actividad eléctrica que registra el corazón.
- Cateterismo cardíaco: se realiza con la introducción de un catéter dirigido al corazón para obtener información sobre la concentración de oxígeno presente y la presión arterial del órgano.
Finalmente, mencionamos que en los niños cuya existencia de la tetralogía de Fallot no es diagnosticada, es posible que cada vez se vuelvan más azules y se compliquen en otros aspectos de salud, como convulsiones, arritmias, episodios de apneas e incluso, endocarditis.
Recomendamos los seguimientos constantes y puntuales durante los primeros meses de vida del pequeño, al igual que ante la presencia de alguno de los síntomas mencionados en la entrada, acudir a consulta médica para descartar cualquier posibilidad de la presencia de dicha patología. ¿Conocías este tipo de anomalía cardíaca?