La miopía es de los trastornos de la visión más frecuente entre las personas, pues se trata de poder visualizar sin tanto problema los objetos que tengamos cercanos a nosotros, pero que no alcancemos a ver con la misma claridad aquellos que estén en una distancia prudente.
Esto es producto de una mala inclinación de la luz, ya que enfoca la imagen delante de la retina, en vez de hacerlo sobre la misma.
Ahora que ya tienes una breve introducción al asunto de la miopía, quizá puedas identificar que tu situación es muy parecida. De ser así, puedes profundizar un poco más sobre este trastorno visual en esta entrada porque estaremos comentando aquellas causas, factores de riesgo y más datos interesantes sobre el tema, pero siempre se recomienda ante estas complicaciones la asistencia médica que determine el respectivo diagnóstico.
¿Cuál es la razón de la miopía?
Para iniciar profundizando con este asunto, es necesario conocer cuál es la razón o causa por la que se da lugar a la miopía. Para ello, se clasifican en dos secciones las partes que trabajan para enfocar las imágenes percibidas visualmente:
- Cristalino: del tamaño similar a un chocolate M&M al igual que su forma, es la parte transparente del ojo que funciona como el lente natural del mismo, pues permite el enfoque de la luz e imágenes de la retina.
- Córnea: un cuerpo similar a un domo cuya superficie es transparente y conforma la capa más externa del ojo.
Ambas partes que acabamos de nombrar, tienen particularmente una curvatura lisa que ayudan a desviar la luz (conocido como refracción) que se percibe con el objetivo de identificar nítidamente desde la retina (parte trasera del ojo) las imágenes que sean percibidas.
Entre otras cosas, cuando existe una miopía severa puede ponerte en riesgo ante otras complicaciones relacionadas con el ojo y la vista, debido a que puede dar inicio a cataratas, glaucoma, desprendimiento de retina y daño central en la retina (también llamado maculopatía miópica).
¿Qué es un error de refracción?
El error de refracción sucede cuando el ojo no cuenta con cristalino o córnea de superficie uniforme y lisa, lo que conlleva a que la luz no se desvíe correctamente.
En términos generales, la miopía comienza a manifestarse al momento en que el globo ocular resulta ser más largo que lo promediado normalmente o incluso, cuando la córnea tiene una forma mucho más curva de lo normal. Entonces, al notarse la presencia de luz, esta se enfoca no sobre la retina sino delante de ella, provocando que las imágenes visualizadas a distancia, sean borrosas.
Por otro lado, existen otros dos tipos de refracción además de la miopía, los cuales son el astigmatismo y la hipermetropía. El primero se refiere a una enfermedad que se desarrolla por la curvatura altamente pronunciada de un lado más que el otro. Cuando el astigmatismo no se corrige, la persona tendrá una visión borrosa.
En cuanto a la hipermetropía, podemos decir que es casi lo contrario al astigmatismo, pues esta enfermedad es producto de la falta de curvatura en la superficie de la córnea o también, cuando el globo ocular no tiene el tamaño promedio, sino que es más corto. Su efecto no es igual al de la miopía debido a que los objetos tanto lejanos como cercanos, se ven borrosos.
¿La miopía tiene factores de riesgo?
El mayor factor de riesgo que se frecuenta, es la genética porque la miopía es hereditaria. Si se trata que alguno de tus padres tiene este trastorno, hay posibilidades que en algún momento comience a desarrollarse, pero las probabilidades de estar más propensos a la miopía, es que ambos padres lo tengan.
Por otro lado, existen algunos estudios que señalan a las condiciones ambientales como factores de riesgo ante la miopía, debido a que estar poco tiempo al aire libre es posible que incentive a un desarrollo de miopía en la persona.
¿En qué momento debo acudir a consulta médica?
El indicador puntual sobre acudir a consulta médica por este tipo de trastorno, es que se te dificulte realizar actividades cotidianas. El médico podrá determinar el grado de miopía que tienes y presentará las opciones para corregir el problema.
De igual manera, es de urgencia que acudas a consulta si se presenta que:
- Aparece una sombra (similar a una cortina) sobre el campo visual.
- Presencias destellos de luz en alguno de los ojos o ambos.
- Puedes visualizar cuerpos flotantes que parecieran derivar en el campo visual.
¿Cuáles son los síntomas de la miopía?
Entre los principales síntomas de un posible caso de miopía en adultos, están:
- Fuertes dolores de cabeza a consecuencia del cansancio de la vista.
- Necesidad de entrecerrar los ojos para visualizar de mejor manera o con más claridad.
- Ver borroso los objetos que estén lejos.
- En las noches, puedes tener complicaciones en divisar las señalizaciones de tránsito e incluso demás vehículos, a eso se le llama miopía nocturna.
Es evidente que no todos están propensos a tener enfermedades oculares, pero no es un factor de más mantener cada cierto tiempo un chequeo médico que descarte cualquier tipo de problema como glaucomas. Los estudios por expertos sugieren hacer exámenes de vista según la edad.
- Si está entre los 20 a 40 años de edad, cada 5 a 10 años.
- Entre los 40 a 54 años de edad, cada 2 a 4 años.
- Entre 55 a 64 años de edad, cada 1 a 3 años.
- Después de los 65 años de edad, cada 1 a 2 años.
Otro factor además de la edad a tomar en cuenta con relación a los seguimientos de cuidado en el ojo, tiene que ver con otras enfermedades como la diabetes, pues si lo padeces entonces el médico pautará la fecha adecuada de consulta. Al igual que es el caso si ya estás usando lentes de contacto o anteojos e incluso, si tienes alguna afección.
¿Qué síntomas puede presentar un niño?
Afortunadamente, una cantidad alta de casos de miopía son tratados desde la niñez tras un diagnóstico posterior a la presencia de los síntomas en los niños con el mencionado trastorno visual:
- Puede observar que el infante está constantemente frotándose los ojos.
- El niño tiene la necesidad de sentarse muy cerca del computador o televisor. Al igual que pide escoger los primeros asientos en el cine u observar la pantalla de un celular cerca de su rostro.
- Ignora los objetos que estén lejos, así como tampoco logra reconocer con claridad las personas que se encuentren distantes.
Al igual que los adultos deben acudir a consultas médicas para el chequeo ocular, los niños también deben hacerlo, ya que es necesario determinar si existe algún problema de visión o, por el contrario, asegurar que esté todo correcto.
Los profesionales como pediatras, optometristas y oftalmólogos, recomiendan que las consultas de los niños se realicen cuando tengan 6 meses de edad, luego a los 3 años y cuando vayan a comenzar el primer grado de estudio para mantener cada dos años los chequeos visuales.
Es necesario tomar en cuenta si el pequeño muestra algún síntoma en el trascurso de tiempo donde no tiene chequeo pendiente. Debido a que, si se detecta que puede haber alguna dificultad por presunta miopía, no debes dudar en acudir a consulta.